Acerca de Abirradero
Abirradero es mucho más que un restaurante; es un verdadero templo para los amantes de la cerveza artesana. Con una impresionante y siempre cambiante selección de grifos, este local se ha ganado a pulso su reputación como uno de los destinos cerveceros de referencia en la ciudad, un lugar donde cada pinta cuenta una historia diferente y donde el personal experto te guiará para encontrar tu maridaje perfecto.
La experiencia, sin embargo, no termina en la bebida. Su propuesta gastronómica está brillantemente diseñada para ser el acompañamiento ideal. La carta se articula en torno a una cuidada selección de tapas, tanto frías como calientes, perfectas para compartir y fomentar la conversación. Para quienes buscan algo más sustancioso, su sección de platos a la brasa ofrece sabores robustos y ahumados que satisfacen los paladares más exigentes, demostrando un profundo respeto por el producto de calidad.
El ambiente en Abirradero es un reflejo fiel del espíritu del barrio que lo acoge: vibrante, auténtico y desenfadado. Es el punto de encuentro ideal para una quedada con amigos, una cena informal de fin de semana o simplemente para descubrir nuevas joyas cerveceras en un entorno acogedor y lleno de vida. El bullicio constante y la energía positiva del lugar invitan a relajarse y disfrutar sin prisas.
La cocina se centra en elaboraciones honestas que realzan el sabor original de los ingredientes. Desde unas bravas con un toque especial hasta carnes a la brasa cocinadas en su punto justo, la oferta es consistentemente deliciosa y variada. Esta combinación de una cocina mediterránea bien ejecutada y una cultura cervecera excepcional es lo que lo distingue y le ha valido el reconocimiento de locales y visitantes.
Ubicado en el dinámico Poble-sec, Abirradero se ha consolidado como una parada esencial para quienes buscan una experiencia gastronómica completa y genuina. Es la prueba de que la buena cerveza y la cocina de calidad no solo pueden convivir, sino que juntas pueden crear momentos memorables. Una visita obligada para explorar la escena artesanal de Barcelona sin renunciar jamás al buen comer.
Lo que comentan los clientes de la zona