Acerca de Velodromo
Más que un simple bar, el Velodromo es una institución que respira historia en cada rincón. Este emblemático local de l'Antiga Esquerra de l'Eixample ha sido durante décadas un punto de encuentro clásico para locales y visitantes que buscan sumergirse en el auténtico espíritu barcelonés, lejos de las propuestas pasajeras. Su legado se siente en el ambiente, convirtiendo cada visita en una pequeña experiencia cultural.
La atmósfera es, sin duda, una de sus grandes bazas. Con una cuidada decoración de estilo art déco, maderas nobles y una iluminación cálida, el espacio transporta a otra época, ofreciendo un refugio de elegancia sobria y atemporal. Es el escenario perfecto tanto para un vermut tranquilo por la tarde, una reunión de amigos o una cena animada que se alarga hasta bien entrada la noche, manteniendo siempre un murmullo de conversaciones y vida.
Su propuesta gastronómica se mantiene fiel a una cocina mediterránea honesta y reconocible, ideal para compartir. La carta destaca por una excelente selección de tapas clásicas, donde los sabores de siempre son los protagonistas. Junto a ellas, ensaladas frescas y entrantes variados completan una oferta pensada para disfrutar sin complicaciones, maridada a la perfección con una cerveza bien tirada o una copa de vino.
Ubicado en la emblemática calle Muntaner, el Velodromo se consolida como un espacio para disfrutar de la buena mesa y las conversaciones sin prisa. Su carácter de bar-restaurante lo convierte en un lugar versátil, adaptado a cualquier momento del día, donde la calidad del producto y el respeto por la tradición culinaria son la base de su filosofía.
En definitiva, Velodromo es una elección ideal para quienes valoran los espacios con alma, la cocina de mercado bien ejecutada y la sensación de formar parte de la historia viva de la ciudad. Una visita casi obligada para cualquiera que desee experimentar una pieza auténtica de la vida social y gastronómica de Barcelona.
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