Panela de Barro

Panela de Barro es mucho más que un restaurante; es un auténtico pasaporte a los sabores más genuinos de Brasil sin salir de Barcelona. Su nombre, que evoca las tradicionales ollas de barro, ya es una declaración de intenciones: aquí se cocina a fuego lento, con paciencia y un profundo respeto por las recetas que han pasado de generación en generación, ofreciendo una experiencia culinaria honesta y llena de alma. La carta es un homenaje a la cocina brasileña casera y reconfortante. No puedes irte sin probar su aclamada *feijoada*, un plato robusto y lleno de matices, o los irresistibles *pão de queijo*, perfectos para abrir el apetito. Cada bocado transporta directamente a un hogar brasileño, destacando por la calidad de sus ingredientes y una sazón que se siente auténtica y directa, alejada de cualquier artificio. La experiencia se completa con una selección de bebidas que son el alma de la fiesta. Una *caipirinha* preparada como manda la tradición es el acompañamiento ideal para realzar los sabores del menú. Para quienes prefieren opciones sin alcohol, los zumos de frutas tropicales frescas son una alternativa deliciosa que aporta un contrapunto de frescura y exotismo a la comida. Ubicado en una de las tranquilas calles de la Vila de Gràcia, el ambiente de Panela de Barro es tan acogedor como su comida. Es un espacio sencillo, sin pretensiones, donde el protagonismo lo tiene el plato y el trato cercano de su equipo, que te hace sentir como en casa desde el primer momento. Su atmósfera relajada lo convierte en el lugar perfecto para una cena informal con amigos o una comida familiar de fin de semana. Con una valoración excepcional respaldada por cientos de comensales, este rincón se ha consolidado como una de las joyas ocultas del barrio para los amantes de la gastronomía sudamericana. Si buscas una experiencia culinaria auténtica, con porciones generosas y a precios más que justos, Panela de Barro es una elección que nunca decepciona y siempre invita a volver.